Creí descubrir en mi interior esa misteriosa fuerza que desde el primer momento me indujo a protegerlo y sentí en carne viva el dolor de su cuartito sofocante y oscuro.
La mayor preocupación que tenía Fernanda en sus años de abandono, era que Meme fuera a pasar las primeras vacaciones y no encontrar a Aureliano Segundo en la casa. La congestión puso término a aquel temor.