Se reconoce de manera general que el capitalismo, cuya seña de identidad es la libre competencia, ofrece la mejor oportunidad para que nuestros pueblos hagan sus sueños realidad.
El capitalismo neoliberal —el consenso de Washington— lo que ha generado es mayor grado de miseria y de desigualdad, y una tragedia infinita a los pueblos de este continente.
Sin duda el capitalismo ha hecho que esta celebración crezca año con año, pues ha fomentado el consumo de productos hechos especialmente para conmemorar esta fecha.
Sus obras más famosas son las que muestran los diferentes grupos de la sociedad burguesa, y su obra maestra es la llamada Guardia de noche, a pesar de que en realidad transcurre de día.
Yo soy un firme defensor del capitalismo, pero no del capitalismo liberal que vende la idea de que los gobiernos no tienen que intervenir, y que tenemos que dejar al mercado actual libremente.
Todo eso nos lleva a la división tradicional entre dos Barrocos: uno protestante y burgués, en el norte de Europa, y otro católico y monárquico, en el sur, aunque había casos mixtos como Inglaterra.