La semana pasada, nuestro colega y amigo mío, el Embajador del Pakistán, comparaba las Naciones Unidas con un velero viejo lleno de filtraciones que tratábamos de reparar en pleno viaje.
Bebía en la sala de estar, bebía en la biblioteca e incluso a veces bebía en el velero; pero nunca en exceso, sino lo justo para alcanzar aquel dulce estado a medio camino entre la sobriedad y la embriaguez.
Valle de Bravo es conocido por su riqueza natural ideal para practicar deportes como escalar, navegar en velero, practicar bici de montaña, además de que tiene rutas de senderismo muy especiales como el Santuario de la Mariposa Monarca.