Continúan aplicándose medidas para vigilar los efectos de la contaminación atmosférica allí donde sigue siendo una amenaza para la salud y la productividad de los bosques.
El compromiso de la mayoría de los países desarrollados de establecer un plazo para la asignación del 0,7% del PIB a la AOD asegurará alguna continuidad en la disponibilidad de apoyo financiero para los países menos adelantados.